En el momento actual que vivimos, la desinformación puede afectar el desarrollo de naciones, de empresas, de instituciones y de las personas. Ante la cantidad de información con la que contamos, se vuelve fundamental poder separar aquella información que es útil de aquella que busca desestabilizar y confundir.
Por ejemplo, el INAI (Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales) se encuentra en esta situación. Una de las falacias que se promueven a través de las redes sociales tiene que ver con el almacenamiento y gestión de la información. Se ha cuestionado (equivocadamente) que por qué el INAI no entrega la información de ciertos actos relacionados con corrupción los cuales han sido ampliamente conocidos gracias a medios de comunicación. Ante ello, es preciso aclarar que el Instituto no es almacén ni bodega, y las preguntas sobre estos temas los ha hecho la ciudadanía, así como la carga de información pública la hacen las instituciones como parte de su trabajo por cargar obligaciones de transparencia.
En ese sentido, es en la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) donde se puede consultar esta información. Recordemos que, por mandato de ley, a partir de 2016 se determinó que se contara con una herramienta tecnológica para concentrar en un solo lugar toda la información pública al respecto y que, a la fecha, se cuenta ya con 10 mil 021 millones 838 mil 846 registros de obligaciones de transparencia y 8 millones 445 mil 009, entre las que encontramos información sobre casos que son de amplio interés público. A continuación, enlisto algunos:
Al escribir el término «FOBAPROA» en el buscador de la PNT se localizan 656 coincidencias: 175 son de obligaciones de transparencia y 479 solicitudes, con preguntas sobre registros sobre qué información tienen instituciones como el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) o la Secretaría de Hacienda sobre este tema, o incluso registros sobre la votación que en su momento se llevó a cabo para aprobar este asunto.
Al ingresar el término «Odebrecht» encontramos 873 coincidencias: 101 obligaciones de transparencia; 717 solicitudes de información que diferentes personas han preguntado, y 55 recursos de revisión que han interpuesto personas por inconformidad. Entre la información pública encontramos un “Punto de Acuerdo por el que se exhorta a la Auditoría Superior de la Federación, incluya en la revisión a la Cuenta Pública 2016, una auditoría con enfoque vertical a los contratos que la empresa brasileña Odebrecht».
El caso del Tren Maya es uno de los más consultados por la sociedad. Al buscar este término se hayan 147 mil 705 coincidencias: 141 mil 784 obligaciones de transparencia; 5 mil 694 solicitudes de información, y 227 recursos de revisión que han interpuesto personas por inconformidad. Los recursos son dirigidos a Fonatur y a Fonatur Tren Maya. Entre ellos encontramos uno resuelto en mi Ponencia donde solicitaban “conocer, respecto del proyecto Tren Maya, los nombres de todas las personas beneficiarias de pagos por indemnizaciones en terrenos de particulares, desde al año 2018 a la fecha, montos de pago, nombres de beneficiarios y ubicaciones de indemnizaciones”, donde FONATUR se declaró incompetente, pero al analizar el caso, concluimos que sí contaba con atribuciones para conocer lo solicitado, por lo que instruimos a realizar una nueva búsqueda, exhaustiva (de verdad) para entregar lo peticionado.
Si queremos saber del término Pegasus, encontramos 2 mil 834 coincidencias: 2 mil 403 sobre información pública, 522 solicitudes de información y 9 quejas de respuesta. Por ejemplo, han solicitado a Sedena “saber cuánto costó el servicio de monitoreo remoto de información del software Pegasus”.
Estos son tan solo algunos ejemplos de la información pública y de lo que se puede hacer en la Plataforma Nacional de Transparencia, una innovación tecnológica al servicio de las y los mexicanos, e incluso a disposición de la sociedad más allá de nuestras fronteras, y que, por cierto, este mes de mayo cumple 7 años. Como pueden ver, el INAI, la cultura de la transparencia y la PNT no se detienen.