Ciudad de México.- Geovanna Bañuelos de la Torre solicitaron a la Secretaría de Relaciones Exteriores reiterar a las autoridades de Estados Unidos de Norte América, a través de los canales diplomáticos correspondientes, la preocupación del Estado mexicano por los miles de niñas y niños que fueron separados de sus familias en territorio estadounidense como consecuencia de la política de “tolerancia cero” instrumentada por el Presidente Donald Trump; y a solicitar que se dé la mayor celeridad y prioridad al proceso de localización, identificación y reunificación de los menores que aún se encuentran alejados de sus familiares.
Mediante un punto de acuerdo, suscrito también por la senadora Cora Cecilia Pinedo Alonso, presentado ante la Comisión Permanente, las legisladoras del Partido del Trabajo recordaron que el pasado viernes 5 de abril, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos informó oficialmente en un documento judicial que le tomará al menos un año estudiar los casos de 47.000 niños no acompañados y acompañados a los que se privó de su libertad entre el 1 de julio de 2017 y el 25 de junio de 2018, como parte de la política de detención y separación de familias instrumentada por la administración del presidente Donald Trump.
La coordinadora del Grupo Parlamentario del PT en el Senado calificó como inaceptable el plazo de dos años que el gobierno estadounidense ha informado que requiere para identificar y localizar a los infantes que fueron separados de sus familias en la frontera con México.
“Desde nuestra perspectiva, es simplemente inaudito que el gobierno estadounidense haya separado a estas niñas y niños de sus familias, entre el 1 de julio de 2017 y el 25 de junio de 2018, y ahora reconozca que no sabe cuántos son, ni cuál nacionalidad y lo más preocupante, que ignore dónde se encuentran”, indicó en la propuesta.
Separar a miles de niñas y niños de sus familias fue una acción que, pese a reconocer como soberana por parte de Estados Unidos, resulta a todas luces violatoria del derecho internacional de los derechos humanos y del principio del interés superior de la niñez, explicó la senadora Cora Cecilia Pinedo Alonso, “en verdad creo que no hemos dimensionado en su justa proporción la gravedad de esta tragedia, porque miles de niñas y niños, al estar separados de sus familias por un período tan largo, en una etapa etaria fundamental para su desarrollo cognitivo y de establecimiento de los lazos afectivos, habrán sufrido ya un daño irreparable”, añadió.
Geovanna Bañuelos resaltó que la Secretaría de Relaciones Exteriores debe expresar a las autoridades estadounidenses, a través de los canales diplomáticos correspondientes, la preocupación del Estado mexicano por los miles niños que han sido separados de sus familias en territorio estadounidenses y que aún no han sido localizados e identificados.
Para las senadoras y los senadores del Grupo Parlamentario del PT en el Senado de la República, la defensa de los derechos humanos de las y los mexicanos, dentro y fuera del territorio nacional, así como de cualquier otra persona, sin importar su nacionalidad o estatus migratorio, es una prioridad y alzaremos la voz las veces que sea necesario, concluye el punto de acuerdo.