La oposición a este dictamen no logrará finalmente impedir “todos los derechos para todas las personas”.
Con su propuesta se abría la posibilidad de dar a los colectivos de la comunidad LGTBIQ+, “certeza jurídica en materia de seguridad social, herencia, prestaciones gubernamentales, creación de patrimonio conjunto, ello en ejercicio de la idea de todos los derechos para todas las personas”.
Zacatecas,Zacatecas.-Javier Calzada diputado local por el distrito II de la Sexagésima Tercera Legislatura del Estado, votó a favor de la aprobación de la propuesta en torno al matrimonio igualitario y la reforma al código familiar en el artículo 100 en Zacatecas, al asegurar que “la oposición a este dictamen no logrará finalmente impedir “todos los derechos para todas las personas”.
El diputado señaló que no hay razones para impedir el reconocimiento de los derechos civiles de las personas del mismo sexo, en tanto que” son más nítidos los fundamentos basados en dogmas, principalmente de fe, creencias que considera una verdad como única e incontrovertible, inamovible e incuestionable, los que generan su rechazo a un segmento de la sociedad que en la mayoría de las religiones deberían considerarse como hermanos”.
En su intervención en tribuna, Calzada señaló que el dictamen de las Comisiones, desechó de un plumazo con argumentos incoherentes, inconexos e ilógicos en torno a la propuesta que el presentó para evolucionar -dijo- “el concepto de matrimonio para estar a la altura de la sociedad mediante la creación de un concepto de aplicación general, donde el Enlace Nupcial sea el mecanismo por el cual dos personas puedan constituir una familia, una comunidad de vida e intereses”.
El diputado, aseguró que con la propuesta presentada se abría la posibilidad de dar a los colectivos de la comunidad LGTBIQ+, “certeza jurídica en materia de seguridad social, herencia, prestaciones gubernamentales, creación de patrimonio conjunto, ello en ejercicio de la idea de todos los derechos para todas las personas”.
Asimismo señaló que se esforzó en hacer una investigación seria, se hizo un análisis jurídico amplio, con rigor metodológico en torno a la propuesta que éste presentó y que no debería ser desechada sin argumentos valederos, “las comisiones y el pleno de la representación popular, si no incluyen el cambio propuesto estarán en contra de la historia y en contra del desarrollo, de la integración plena y de la equidad y justicia”.
Javier Calzada señaló ante el pleno que en situaciones como esta, en la que se confrontan el derecho establecido y el dogma, “la progresividad de la norma y el conservadurismo; la universalidad de los derechos y los privilegios de castas; es necesario revisar si acaso los servidores del Estado somos sujetos del derecho subjetivo de la objeción de conciencia”.
Acotó que si los diputados y las diputadas, al amparo de nuestra fe -dijo- “o por la presión de grupos de poder, podemos o no gozar del libre albedrío de decidir si podemos reconocer o no derechos que ya son reconocidos por la Constitución, en tanto que el laicismo no es hostil a la religión ni a los sentimientos religiosos, sino una reacción legítima frente al clericalismo y a los intentos de imponer una determinada moral a toda la población”.
El diputado aseguró que hay quienes defienden su oposición al reconocimiento de los derechos de la comunidad LGBTTTIQ+ aduciendo que es una mayoría quienes están en contra de esta iniciativa, esto al recordar al politólogo Giovanni Sartori, sobre la democracia que no es -acotó- “solamente la decisión de las mayorías, esa sería una democracia trunca, la verdadera democracia es la que contiene la inclusión y el respeto de las minorías”.
Indicó que las mayorías no deben imponer criterios sobre el derecho a la felicidad de las personas, no pueden obligar a una persona homosexual a vivir o casarse con una persona de diferente sexo si no es su deseo y voluntad, tampoco es justo –estimó- “que se les impidan sus derechos que a otras figuras ya están concedidos, como es el concubinato, las parejas de homosexuales no tienen derecho a inscribir a su pareja en las instituciones de seguridad social, no tienen el derecho a alimentos, a los derechos sucesorios de herencia, a conformar un patrimonio y el derecho sustantivo a la igualdad y a la no discriminación”.
Finalmente Javier Calzada se definió como un hombre libre y liberal, de izquierda progresista, “apegado a mis convicciones y principios, la corriente de pensamiento denominada izquierda tiene su origen en la piedra angular de que todos los hombres y mujeres nacemos libres e iguales, a contrario sensu de la religión parte de que todos nacemos con la carga del pecado original, que hay que desprender mediante un sacramento”.